Aprendo jugando...

Promoción utilizada.

Los programas de Trabajo Social y Biblioteca se unieron para planificar un tema sobre hábitos de estudio para impactar a los padres. Decidieron que el taller se daría de una manera atractiva y que ofreciera recursos reales y a la mano de cualquier persona. Así que con esto en mente comenzamos a promover nuestra actividad. Creamos un anuncio que fue pegada en cada libreta de nuestros estudiantes, e hicimos afiches los cuales pegamos en varios puntos de la escuela.

Muriel dirigiéndose a los padres.

El miércoles 2 de septiembre se dieron cita 42 padres para recibir el taller.  Este comenzó con una explicación de lo que es Hábitos de Estudio, y cómo llevarlo a cabo.  Yaritza Muriel, trabajadora social, trajo una presentación en Power Point con puntos importantes para desarrollar buenos hábitos de estudios en los hijos.

Se puede utilizar el cartón de un cereal o de las cajitas de jugos.

Enseguida Iris Lafontaine trajo ejemplos de posibles formas de estudiar.  Estos ejemplos fueron presentadas en la pantalla y varios de ellos en su forma real.  

Tapitas de refrescos o agua.

A medida que pasaban los ejemplos se iba recalcando y demostrando que el material para hacerlo es uno de fácil acceso. 

Tapitas con letra en foamy.

La Sra. Lafontaine trajo ejemplos para ser utilizados mayormente en los grados de kinder a 3ero.

Palitos de tender ropa.

Se mostró que objetos que se usan a diario pueden ser utilizados para jugar y aprender.

Platos desechables.

Los padres no tienen que gastar tanto creando estos juegos, y resultan entretenidos para los estudiantes.  Y lo más importante: que aprenden.

Este juego puede ser utilizado para sumar y restar.  Es una manera concreta de poder entender estas operaciones.

Palitos de tender ropa y un gancho.

La Prof. Olga Pereira, bibliotecaria, presentó ejemplos para ser utilizados con estudiantes de 3ero en adelante.  Este además de usarlo con letras del abecedario, puede ser utilizado con números, o con palabras para ser ordenados en orden alfabético.

Mientras se daban los ejemplos, se daban detalles e ideas para que estos se utilizaran de una manera efectiva.  Estos ejemplos motivan al estudiante a aprender mientras juegan.

Este ejemplo en específico es uno que utiliza la asociación.  Si el estudiante ve esto continuamente, porque está pegado en su cuarto u otro lugar donde lo ve todos los días, esta imagen se le queda en su memoria.  Y cuando llega el momento de utilizar esta información, el estudiante busca en su memoria la imagen, y lo aplica cuando es necesario.

Demás está decir lo interesante que resultó el taller.  Muchos padres compartieron la forma en que ellos estudian con sus hijos y qué utilizan para que este dé resultados.

Algunas fotos del transcurso del taller.

Terminado el taller como tal, los padres hicieron una manualidad.  Crearon un mini libro para hacer utilizado para llevar en el carro o un bultito en una salida de paseo.